martes, 11 de marzo de 2014

¡Bienvenidos!

  









    Esta herramienta  ha sido creada con la intención de facilitar la enseñanza a los estudiantes de locución del V semestre de la escuela de Comunicación Social de la universidad Arturo Michelena. Este enlace servirá de complemento a las clases impartidas en el aula. La finalidad es que ustedes se conviertan en participes de su propio proceso de aprendizaje. 

   La asignatura de locución tiene  una duración de cuatro horas académicas con una  finalidad teórico-práctica, las dos primeras horas de clase serán dedicadas al saber (conocimiento, interacción, participación, profundización, lectura) en ella será oportuno el intercambio de saberes entre el alumno y el profesor.  La segunda hora se dedicará al hacer (práctica de los conocimientos adquiridos en los salones) con la intención de darle uso a la voz, herramienta principal en esta asignatura. 




   Un buen locutor o locutora se hace con la práctica constante, el entrenamiento de la voz, la disciplina, la lectura en voz alta, la confianza,  la seguridad y el dominio emocional. Está claro que hay personas que nacen con una voz agradable al oído, o bien llamada radiofónica, pero también es cierto que  la voz se puede educar para que alcance los niveles óptimos que permiten que una profesional pueda utilizar su discurso a través de un programa de radio, o lograr vender un producto. Quizás no tengas una voz radiofónica, pero si te esfuerzas, y haces de la práctica un ritual, tu voz cambiará, tu discurso mejorará y los que están cercanos a ti lo agradecerán. El dicho "la práctica hace al maestro", lo confirma, solo con la dedicación a lo que amas, se pueden lograr los objetivos. Es como un músico que desea tocar un instrumento, si toma éste solo por tres días, el instrumento no dará las notas que él aspira, jamás sonará como le suena al maestro, porque para que iguales al mentor se necesitará tiempo, estudio y dedicación. Si no hay tiempo, ni disciplina no hay dominio del objeto, ni habrá sonidos melodiosos. También es igual que cuando se intenta aprender bicicleta, el  miedo a caer y a lastimarse son los primeros en aparecer, pero si se toma la bicicleta todos los días, poco a poco se tiene el control, y las caídas son menos, hasta que llegará un día en el que las piruetas aparecerán como parte del arte del dominio del volante.

    La locución no es solo para recibirla en clase, requiere de tu pasión, tu esfuerzo, y tu práctica en casa, solo así verás resultados verdaderos, toma el reto de esforzarte cada día. Haz de esta clase una experiencia, para compartir o enriquecerte como estudiante y futuro profesional. Recuerda que solo tú tienes el poder de convertirte en un excelente locutor.


     
   

         

    


    


    

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